jueves, 8 de julio de 2010

Cultivo del café (2)

El proceso de obtención de un nuevo árbol de café es un proceso sencillo que requiere paciencia para llegar hasta la obtención de los frutos que normalmente es a los dos años de siembra definitiva del cafeto.

Una vez tenemos el café en el invernadero o bolsas de almácigo se requiere limpieza permanente del nuevo cafeto y generalmente requiere riego pues es un ser vivo que está a nuestro cuidado y aún no tiene la fortaleza suficiente para sobrevivir en el medio que se encuentra.
Cuando el nuevo árbol de café alcanza una altura aproximada de 20 centímetros variando según la variedad de café o tres o cuatro o hasta cinco pares de hojas, se procede a la siembra definitiva en el lote.

El proceso de siembra requiere especial cuidado para las zonas de ladera por muchos motivos. Debe definirse la distancia de siembra entre árboles y entre surcos dependiendo principalmente de la variedad de café, en la que los árboles frondosos y amplios requieren 2 metros entre surcos y 1,8 metros entre árboles y los pequeños que pueden sembrarse a 1,8 metros entre surcos y 1 metro de puente. Estas medidas son generales y no aplican específicamente a una variedad de café o a un tipo de terreno o sombrío - libre exposición; pues las consideraciones finales respecto a la siembra deben darse por una persona calificada o con experiencia en cultivos de café. Es común encontrar en terrenos planos cultivos de café a 1 x 1 metro en cuadro o 1,2 x 1,2 en triángulo según la calidad del suelo, frecuencia de abonos, libre crecimiento y poda o zoca a los cinco o seis años. Por tanto es necesario definir previamente las condiciones del cultivo para establecer la forma de la siembra.

Al momento de sembrar el almácigo en el lote con las condiciones de siembra y cultivo claramente definidas, es conveniente aplicar un abono preferiblemente de la misma finca consistente en humus o tierra rica en nutrientes o cereza (pulpa) de café en estado avanzado de descomposición o realizar la siembra en lotes con buena capacidad de sostenimiento para el nuevo árbol de café. Esto porque el desarrollo inicial del cafeto es fundamental para el adecuado crecimiento del árbol de café.

El tiempo de crecimiento varía según las condiciones del cultivo, el suelo y ambientales, pero generalmente a los dos años se inicia la producción de café iniciando con unos pocos granos llegando a los topes máximos de producción entre los cinco y siete años según la variedad y el tipo de cultivo, pudiendo ser mayores en cultivos tradicionales con variedades de porte alto como el arábigo, Tabi o Borbón.

martes, 6 de julio de 2010

Cultivo del café

El café colombiano se produce entre 1000 y 2000 metros sobre el nivel del mar. Por las condiciones topográficas del suelo colombiano, el cultivo del café son óptimas en la región andina. Aunque la altura no es una condición necesaria para el cultivo
del café, esta condición favorece el desarrollo normal de la planta en esta zona central del planeta y adicionalmente mejora las condiciones de sabor del producto final.

Inicialmente el café es tomado de la planta cuando se encuentra en estado de maduración (rojo o amarillo), lavado a mano y secado a la sombra. Durante este proceso se seleccionan los granos de café más apropiados en cuanto a su tamaño y forma descartando los granos de café redondos o triangulares. En un espacio al aire libre se construye un germinador, generalmente construido elevado, con una capa de tierra y encima de esta una mayor de arena gruesa de río que facilite el proceso de desarrollo de la planta de café. Después de conformado el germinador se procede a esparcir la semilla encima de la arena cuidando de no dejar granos amontonados, luego deben cubrirse todos los granos de café con arena y generalmente bolsas de papel.

Durante el proceso de germinación, el café debe permanecer húmedo. Una vez broten los fósforos (ver foto 1) se inicia el proceso de trasplante de los nuevos cafetos a bolsas con tierra que facilitan el crecimiento del café.

Algunos caficultores prefieren trasplantar los nuevos árboles cuando abren las primeras hojas del café. En London iniciamos el proceso de trasplante con el surgimiento de los fósforos y terminamos sembrando en las bolsas las chapolas (ver foto 2). El café podría ser sembrado directamente en los lotes pero el cuidado de los nuevos árboles de café es más sencillo en las bolsas de almácigo.

En este periodo el café es susceptible especialmente a la enfermedad del tallo y a debilidad generalmente ocasionada por la mala calidad de la tierra. Para prevenir la enfermedad del tallo es conveniente aplicar agua muy caliente a la arena antes de sembrar los granos de café y en caso de ser necesario aplicar un fungicida recomendado por su agrónomo o almacén agrícola. Para mejorar la coloración de las hojas y la calidad de los cafetos se puede aplicar un abono natural o químico con alto contenido de nitrógeno; claro que en esta etapa del café es conveniente favorecer el desarrollo radicular (raíz) mediante abonos ricos en fósforo.