Los cuidados que requiere el nuevo almácigo sembrado son similares a la mayoría de plantas. Mientras alcanza la edad adulta requiere un terreno con una apropiada capa vegetal, agua o humedad, nutrientes de la tierra y del aire. La limpieza del terreno frente a otras plantas o pasto o arbenses es fundamental, toda vez que la nueva planta de café crecerá mejor y más rápidamente sin competencia.
En esta etapa también es conveniente aplicar abonos que favorezca el crecimiento radicular como son los ricos en fósforo para que el aseguramiento de la planta al suelo sea adecuado. En caso de encontrarse hojas amarillas cuando las condiciones de humedad son favorables es conveniente aplicar abonos ricos en nitrógeno. Sin embargo hay que proceder con prudencia o contar con el apoyo de un agrónomo o una persona especialista en café.
Los cultivos intensivos requieren un poco más de abonos y un especial cuidado frente al sol por su exposición directa en la que se debe garantizar la provisión de agua en periodos de intenso verano con árboles de café en crecimiento.